Por una Pascua de paz

Roma (Italia). Desde Guwahati (INDIA) la Madre General de las Hijas de María Auxiliadora, Madre Yvonne Reungoat envía su Mensaje con los Augurios de Pascua. “Deseo llegar a cada una de ustedes, a las comunidades educativas, a las y los jóvenes, a cada persona que sufre en silencio, en abandono, en pobreza y es humillada en su dignidad de creatura querida y amada por Dios.

La Resurrección de Jesús es una Buena noticia para todos! Es la luz que surge en las tinieblas y abre un camino de futuro allí donde todo parece sin horizontes!”

A continuaciòn, el texto completo con el mensaje

Queridísimas Hermanas,

Desde la India, lugar donde me encuentro realizando la visita a las Hermanas de la Inspectoría de Shillong y Guwahati, tierra rica de cultura, de espiritualidad y donde los signos de la vida son abundantes junto a los retos y esperanzas, les deseo una Pascua con alegría, paz y esperanza.

Deseo llegar a cada una de ustedes, a las comunidades educativas, a las y los jóvenes, a cada persona que sufre en silencio, en abandono, en pobreza y es humillada en su dignidad de creatura querida y amada por Dios.

La Resurrección de Jesús es una Buena noticia para todos! Es la luz que surge en las tinieblas y abre un camino de futuro allí donde todo parece sin horizontes!

Jesús está vivo! ¿Lo sentimos así? ¿Lo descubrimos presente en nuestra vida, en la historia?

Personalmente me impresiona mucho encontrarme en todo el mundo, con personas que  manifiestan que Él está vivo. Esta experiencia hace crecer cada vez más mi esperanza y total confianza en Él!

La luz de la Resurrección surge aún en estos tiempos difíciles que estamos viviendo a causa de la violencia inhumana que golpea, sobre todo, a las personas más vulnerables: niños, jóvenes, familias, pobres, refugiados, emigrantes. No somos indiferentes a esta situación, sino que nos sentimos profundamente llamadas a reaccionar con valentía tomando la decisión de ser “artífices de paz”, no con gestos imposibles, sino a través de pequeños sacrificios, opciones concretas de cada día, que hacen de nuestras comunidades “evangelios de paz”, siendo así signos de la resurrección de Jesús que quiere manifestarse por medio de nosotros.

Son numerosas las comunidades que viven en situaciones de gran precariedad a causa de la guerra o de otras formas de violencia y que deciden permanecer, aún arriesgando la propia vida, con tal de mantener viva la esperanza y proclamar que la vida es más fuerte que la muerte, que la paz es posible y es un deber, porque es un derecho de todos.

Queremos ser  solidarias con ellas y entre nosotras, aprovechando cada ocasión para sembrar “gestos pascuales” de comprensión, de bondad y ayuda mutua tanto a nivel material como espiritual.   Son pequeñas gotas de bien, gotas preciosas que con gran generosidad queremos dar para vivir realmente la Pascua de Jesús y testimoniarla como “Mujeres resucitadas”.  

Acojamos con corazón abierto la invitación del Papa Francesco  dirigida a cada persona de buena voluntad: «En este año 2017 queremos comprometernos, con la oración y con la acción, a ser personas que han desterrado de su corazón, de sus palabras y de sus gestos la violencia,  y construir comunidades no violentas, capaces de cuidar la casa común. Nada resulta imposible si se lo pedimos a Dios en la oración. Todos podemos ser artesanos de la paz.» (Mensaje de la Jornada Mundial de la Paz 2017).

Se trata de un camino comprometido que deseamos recorrer sin cansancio, junto a todas las personas que sueñan una Pascua de resurrección para toda la Familia humana.  Pienso de manera particuar en muchos jóvenes que, en diversas formas de voluntariado, están dispuestos a cansarse y ofrecer sus competencias compartiendo con los otros jóvenes la búsqueda de los caminos de la paz y la justicia. Es un sueño en el que debemos creer y  que debemos apoyar.

Termino este mensaje, agradeciéndoles por los numeros augurios que me han llegado. Les pago con mi oración y con el deseo profundo de estar en comunión con todas ustedes y con mucha gratitud por su incansable compromiso de testimoniar la alegría que Jesús Resucitado nos trajo.
A María, Mujer pascual, le confío toda la vida y misión de ustedes.

Suor Yvonne Reungoat fma


Guwahati, 11 de abril de 2017

Alta resolución - ppt, pdf, Mensaje de la Madre

Baja resolución - ppt, pdf, Mensaje de la Madre

https://youtu.be/0PcZnGuGgmE

https://www.cgfmanet.org/21.aspx?lingua=3&sez=21&sotsez=1&detsotsez=1&doc=1180

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