Con María estamos llamadas a vivir nuestra vocación transformando cada instante de nuestra existencia en un gozoso himno de adoración y de alabanza para ser, hoy, signo de los bienes celestiales ya presentes en este mundo (cfr. C 8).
Sintámonos unidas, en la solemne celebración del 5 de agosto, y renovemos nuestra fidelidad a Dios por los jóvenes y las jóvenes. Demos gracias al Señor por las hermanas que harán su primera profesión y la profesión perpetua, por todas las que celebrarán los varios aniversarios: 25, 50, 60, 70, 75 y 80 años de profesión.(Circular 929)
Felicidades hermanas!!
Inspectoría Sagrado Corazón- ECU